domingo, 27 de marzo de 2016

Esperando un verano

De repente llega un día en el que sientes que has dejado de sentir ¿Cómo es posible? Muy fácil te cansaste de luchar, de darte de golpe y de romperte al final del día.


Llega un día en el que la gente se te queda mirando como si no te conocieran, te preguntan que te pasa una y otra vez pero no te pasa nada simplemente te has vuelto una persona fría y desconfiada que por no fiarte no te fías ni de tu sombra. 

El 95% del tiempo me siento así, sólo se salva el momento en el que me enfrento a un papel en blanco, cuando buso dar palabras a esos sentimientos que se agolpan dentro de ti. La gente sólo ve que te has vuelto fría y por lo tanto piensan que has dejado de sentir, la verdad es que ojala fuera así y pudiéramos convertirnos a veces en robots que hacen todo mecánico y no volver a sufrir pero las cosas no funcionan así. 

Por mucho que lo desees esos sentimientos no van a desaparecer simplemente los guardamos de cara a los demás bajo una capa de hielo esperando que llegue otra vez el verano que todo lo puede, lo derrita y se vuelvan a dejar ver ante una persona que de verdad los valore, los guarde y sepa quedarse a tu lado para que ese invierno nunca vuelva. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario